Te presentamos la segunda entrega del recorrido que iniciamos en enero para ir profundizando en cada uno de los rasgos más significativos de esta aventura evangélica que se nos ha ido regalando.
A partir de ahora, las entregas serán bimensuales. En esta ocasión, se nos ofrece el segundo de los Rasgos Fundamentales: El Gozo de la Gratuidad.
Te animamos a rezar el material preparado y a compartir de lo que rebose el corazón dejando algún comentario. Ojalá sea una herramienta para seguir haciendo verdad el «nacido de todos y para todos» y continuar en la búsqueda conjunta del Espíritu de Dios.
¡Que aproveche!
MATERIALES
- Cuadernillo (en diferentes formatos): Descargar PDF – Descargar DOC – Ver vía web – Descargar RTF (sólo texto)
Ojalá lo consigas, Asun. A seguir caminando.
Hola a todos, soy Asun:
Estoy leyendo los comentarios a cerca de la Gratuidad y tras reflexionar me surgen muchas dudas ( lo siento pero a veces la teoría me la puedo saber y los hechos concretos del día a día me cuestan más, y por eso intento ir aprendiendo desde la distancia lo que es y debe ser uno de los principios y fundamentos que muevan nuestra existencia.
Entiendo que llevarlo a la práctica es tomar conciencia de la parte divina que hay en nosotros ( a Su imagen y semejanza) y dejarla Ser. De manera que lo que damos de forma gratuita no es tanto lo que tenemos sino lo que somos.
Tengo un niño con año y medio y sería algo así como esas noches que te pasas en vela por los dientes o esos sitios a los que no vas o esas comidas que le elaboras con tus 5 sentidos. Lo haces porque te sale, sin esperar nada pero recibiendo el doble con una sonrisa…
No se si me explico…
Ojalá esa sensación de dar todo y gratis lo pueda trasladar al resto de mi vida. Pero me resulta confuso y difícil.
A seguir aprendiendo…
Buenas noches y besos
Salvo fuerza mayor, de eso y de más tendremos ocasión de hablar mañana personalmente. Un abrazo, Fermín.
A veces reducimos este rasgo al dinero. Gratis lo recibimos y gratis lo damos .El origen es la gratuidad de Dios, su gracia en nosotros. Cuando uno recibe ese amor incondicional y lo experimenta empieza a fluir lo mismo hacia el mundo, hacia todos los hermanos… y se convierte en gozo, en alegría profunda de ofrecer a los demás lo que antes hemos recibido gratuitamente de Dios. Ni con mil vidas podríamos devolver lo que hemos ido recibiendo a lo largo de nuestra existencia de un Dios que se comparte, se reparte sin pedir nada a cambio. A veces buscamos que nos reconozcan lo que hacemos con algún aplauso o aprobación. Ahí ya no hay gratuidad porque nos buscamos a nosotros mismos. Lo importante es descubrir que en lo desapercibido y en lo pequeño, si lo vivimos en verdad y desde el amor, nos llega sin darnos cuenta el ciento por uno. Que fluya el gozo de la gratuidad en nuestras vidas y que, así, nos sintamos profundamente alegres de compartir lo que somos y tenemos como Dios ha compartido todo lo que es y tiene con nosotros. Vivir este rasgo es entrar en la sintonía con la comunicación cristiana de bienes. Es poner en medio de la comunidad nuestros 5 panes y 2 peces para que haya para todos y nadie pase necesidad. La gratuidad llama a la gratuidad.
Quiero hacer norma de mi vida
la verdad de tu Evangelio.
Tú eres radical,
en ti no hay medias tintas;
la ambigüedad no tiene cabida
en tu seguimiento,
eres «lo gratuito» de Dios al hombre,
su «gran regalo».
Nuestra gratuidad humana necesita luz y salvación. La gratuidad de Dios se ha encarnado en la gratuidad humana de Jesús. En esta revelación la gratuidad de Jesús no aparece en oposición a todo lo que nosotros podamos suponer: el deseo, el interés, el poder ,incluso la competencia…Jesús nos habla de que si alguien quiere ser el primero que compita en ser el último .El nos habla de amor y para esto nos pide amar al prójimo como a nosotros mismos .El verdadero sentido de la gratuidad está en que tenemos que acercarnos a Jesús…
Celebramos con mucho calor en el corazón el trabajo que se lleva a cabo con el estudio, el recuerdo, y la riqueza que ha traído este Rasgo Fundamental: el Gozo de la Gratuidad. En, desde y sobre él se ha manifestado la Palabra del ciento por uno. Se ha dicho a lo largo de muchos años que «el mejor negocio» que acometió el grupo Brotes fue precisamente el ser gratuitos. Gracias a esa «inspiración» proporcionada desde el principio, tenemos amigos, casas, posibilidades, proyectos que se renuevan increíblemente, y que como consecuencia ha servido para muchos. En estos momentos se proyecta hacia algo que se intuyó hace largos años, pero que por alguna o algunas razones podíamos pensar que no se daría jamás. El «entre todos» crea cada vez mayor expectativas de una motivación/función que servirá a toda la Iglesia, según un carácter que está basado en una Esperanza y concreción visibles. Ésta se deja entrever con mayor firmeza, y nos ofrece Luz sobre la complementariedad y autoridad que solo puede nacer en la búsqueda conjunta del Espíritu de Dios.
Que el Señor siga inquietando y alumbrando a quienes se sienten llamados a entrar, cada vez más, mar adentro.
Rosy y Vicente